Los 4 paso del control de Chinches
El control de los chinches es complejo, ya que los sistemas insecticidas de tratamiento se han mostrado poco eficaces y/o poco eficientes. En caso de chinches el conocimiento es la primera arma de lucha y la más eficaz. Debemos conocer a nuestro enemigo y debemos conocer la naturaleza del lugar afectado.
1. INSPECCIÓN y CUESTIONARIO: Se debe determinar que realmente tengamos un problema de chinches. El afectado puede confundirse con otras plagas hematófagas, cómo pulgas o mosquitos. Conocer los detalles es importante, donde le pican y cuando. Inspeccionar los elementos (colchones, canapés, mesita, enchufes, etc) y sus materiales (pladur, moquetas, arrimaderos de madera, etc), nos puede ayudar a encontrar rastros de chinches y a determinar los elementos «amigables» para la plaga de chinches.
2. PREPARACIÓN y TRATAMIENTO: Antes de tratar, se debe preparar la estancia adecuadamente. Se debe vaciar la habitación de tejidos (cortinas, ropas de camas y ropa, funda especial anti-chinches para colchones, etc) y someterse a un lavado a 60ºC. Es necesario el desmontaje de piezas o elementos que sean susceptibles de hacer de reservorio de la plaga (por ejemplo cabezales de cama fijos, patas enroscadas, juntas moquetas o parqués). El tratamiento debe realizarse por personal especializado, ya que es una tarea harto difícil y que requiere conocimiento de los hábitos de las chinches de cama. El tratamiento más recomendable es mediante vapor en seco a altas temperaturas y aspiración. Aunque a menudo esta intervención debe ir apoyada de la aplicación química dirigida (ya sea en forma de barreras o polvo de forma dirigida) . A veces se requiere de una pulverización con insecticidas de acción de choque, pero en estos caso es necesario implementar una estrategia previa para evitar el desplazamiento de la plaga.
3. FORMACIÓN DEL PERSONAL: Debido a que los chinches son una plaga re-emergente, en nuestra actual sociedad, el riesgo de reinfestación es elevado, sobretodo en aquellas personas que viajan a menudo o en establecimientos receptores (cómo hoteles). La formación debe consistir en aprender a identificar los signos de la presencia de chinches y en adoptar una serie de buenos hábitos. Cómo revisar los puntos claves de una habitación antes de ocuparla, utilizar maletas poco «amigables» para los chinches (sin bolsillos externos), mantener el orden de ropas y equipaje, controlar la temperatura de las habitaciones, etc.
4. REINSPECCIÓN y RE-TRATAMIENTO: A los 15 días del tratamiento, es necesario volver a inspeccionar la estancia para detectar posibles chinches que hayan podido salir de los huevos escondidos y de difícil acceso. En caso positivo se debe repetir el tratamiento y volver a inspeccionar a los 15 días.
Huevos de chinches y mudas (encima del taco de madera)
Huevos de chinches de las camas